El
gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila, anunció ayer en San Felipe del
Progreso, el fortalecimiento del programa Apadrina un Niño Indígena. El
mandatario ratificó su respaldo a los sectores menos favorecidos y señaló que
el programa llegará este año a casi 6 mil niños de las etnias indígenas
presentes en la entidad mexiquense, tal es el caso de mazahuas, otomíes,
tlahuicas y matlazincas, mediante apoyos de “padrinos” que laboran en sectores
de gobierno. Los apoyos consisten en 150 pesos quincenales que aportan los
funcionarios y una aportación similar por parte del gobierno mexiquense.
Si
bien programas de esta naturaleza resultan fundamentales para la supervivencia
de muchas familias (es decir que son buenos en el corto plazo), no brindan herramientas
sólidas que resuelvan el problema de la pobreza de fondo, al garantizar el ingreso
o la estabilidad en un nivel de vida aceptable en el largo plazo. Por otra
parte, los beneficiarios de estos programas se vuelven entes pasivos que tienen
un incentivo para permanecer en la pobreza, pues dejar de ser pobre significa
dejar de recibir ese apoyo. Así se perpetúa un círculo vicioso.
En
contraposición, los proyectos productivos son un mecanismo que funge como un
motor generador de empleos y de riqueza. Un caso exitoso de instauración de un
proyecto productivo está en la planta potabilizadora EcoAlberto, proyecto
social Bonafont, en el Valle del Mezquital. Con una inversión de 6 millones de
pesos, se instauró una planta potabilizadora de agua con tecnología francesa,
que coadyuvará a solucionar el problema sanitario de metales pesados en el agua
que ingieren los habitantes del Valle del Mezquital, al tiempo que generará
empleos para muchas mujeres que podrán vender garrafones.
Imagen de Nicolás Maldonado Meraz/Alianzatex |
Xóchitl
Gálvez Ruiz, consejera de Danone Communities en México, fue la principal
promotora del proyecto que desde hace tres años comenzó, con la entrega de
documentación en las oficinas centrales de Danone, en París, Francia. De
acuerdo con la ex funcionaria federal, EcoAlberto es un proyecto económico que
generará alrededor de 200 empleos para mujeres de la comunidad: “cada mujer que
venda un garrafón ganará cuatro pesos, si vende 10 garrafones diarios ganará 40
pesos al día”, explicó.
Danone
Communities apoyó con un crédito de 4.5 millones de pesos que será liquidado
por la comunidad en cuatro años, que empezará a correr a partir del 2013;
mientras que la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas
aportó 1.5 millones de pesos y la Sedesol fue la responsable de la ejecución de
la obra.
Pobreza
y riqueza
El
apoyo anunciado por el gobernador del Estado de México para un niño indígena es
de 150 pesos quincenales, que se otorgan por ser pobre. La ganancia que obtendría
una mujer en 10 días hábiles podría alcanzar 400 pesos, a cambio de su trabajo y
de la posibilidad real de salir de la pobreza.
Con
información de Misael Zavala publicada en http://impreso.milenio.com/node/9038425,
y de Teresa Montaño, publicada en http://www.eluniversaledomex.mx/otros/nota28144.html
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