Guerra sucia del PRD está motivada porque se saben perdedores

En lugar de reconocer su error, Razú y el PRD buscan a quién echarle la culpa ante la ilegalidad en que incurrieron al proponer un plan de chantaje que cambia empleo por votos, los perredistas han comenzado una “campaña sucia” en donde reparten volantes para desprestigiar la campaña de Acción Nacional.

El PRD va a tratar de confundir a las personas. Están desesperados saben que su candidato no se sostiene, que es parte de toda la corrupción de esta delegación. El PRD sabe que va a perder esta elección.

Los perredistas no saben a dónde voltear para buscar a los responsables de sus fallas, cuando en realidad los tienen al interior de su primer círculo. Si buscan culpables deberían ver entre su propio equipo el cual se equivocó de manera grave en su propuesta chantajista, pues comprometen recursos públicos sin tenerlos.

La determinación del Instituto Electoral del Distrito Federal, les dio un severo golpe al corazón de su campaña que demostró que su propuesta principal de chantajear a los electores es ilegal. Hoy comienzan con una campaña sucia, de desprestigio, pero, como el lodo, hay que esperar a que seque para que se caiga solo.



Mis adversarios basaron su campaña en entrega de despensas o promesas de apoyos y que ahora que ya no se distribuirán continuarán con difamaciones a pesar de que la suspensión de la entrega de la tarjeta fue una decisión del IEDF y la entrega de despensas por parte del Gobierno del Distrito Federal.

La trampa, el chantaje y la amenaza es su estrategia. El PRD comienza a sentir pasos de la azotea, se saben en riesgo de perder y comienzan a tirar para todos lados, sin embargo, el electorado, los ciudadanos son inteligentes y sabrán decidir de manera adecuada. El votante está cansado de las amenazas y de las promesas, por eso nosotros proponemos un plan real, efectivo y a futuro para hacer de la Miguel Hidalgo una delegación moderna, limpia y sobre todo, segura. Adiós a los ineficientes.